Juan Francisco Casas. «Non piangere» (Galería Fernando Pradilla)

«Que las mujeres se dediquen al arte es un acto heroico»

Juan Francisco Casas transforma a Artemisia Gentileschi en la galería Fernando Pradilla en heroina desde la que homenajear a la mujer actual. Todo con novedades en su habitual estilo realista

Juan Francisco Casas durante el montaje de «Non piangere» (Foto: Ángel de Antonio)

En 1944, la escritora Anna Banti convierte la biografía de la pintora barroca Artemisia Gentileschi en biografía con un texto destruido por los bombardeos nazis y que volvió a reescribir en 1947 (un texto, por cierto, que ahora recupera Periférica). En 2008, el pintor Juan Francisco Casas, durante su beca en la Academia de España en Roma, «descubre» a Gentileschi, pero no es hasta que cae en sus manos la novela de Banti que no da con la clave para integrar «la heroicidad» de esta creadora en su discurso. El resultado, doce años después, es Non piangere, en la galería Fernando Pradilla (Madrid). Una amplia serie en la que, con los cuadros de Gentileschi de fondo, el andaluz habla de sí mismo a través de los desnudos de mujeres, agentes del arte, que conforman su día a día. ¿Hipersexualición de sus cuerpos? ¿Empoderamiento femenino? ¿Reto artístico? De todo ello hablamos con el autor. Continuar leyendo «Juan Francisco Casas. «Non piangere» (Galería Fernando Pradilla)»

«Queridas viejas», el proyecto feminista de María Gimeno

María Gimeno corrige la ausencia de mujeres en los manuales de Historia del Arte con «Queridas viejas» 

Si hay un volumen que ha marcado a generaciones de artistas este es «La Historia del Arte», de Gombrich. Pero en él no hay rastro de mujeres. María Gimeno les devuelve el espacio que se merecen con un proyecto que culmirá en la Trasera de la Complutense

María Gimeno en su estudio de Madrid. Foto Oscar del Pozo

En el mundo del arte, ha habido mujeres a la altura de Leonardo da Vinci (incluso anteriores a su figura), como Hildegarda de Bingen. También creadoras de técnicas (como la del pastel, la cual se lo debemos a Rosa Alba Carriera). Féminas que llegaron a ser en vida mucho más importantes que sus coetáneos masculinos: Elisabetta Sirani, enterrada junto a Guido Reni; o M. L. Élisabeth Vigée Lebrun, que llegó a entrar en la Academia Francesa, tras ser pintora de Corte de Maria Antonieta. Nombres que se nos hacen más cercanos –Louise Bourgeois, Frida Kahlo, Sonia Delaunay, la española Maruja Mallo…–. Pero los grandes manuales de Historia las han obviado. Han borrado sus nombres. Lo que no se escribe –o no se pronuncia– no existe. Sobre todo uno, un libro de referencia: «La Historia del Arte», de Ernst Gombrich, con el que se han formado generaciones y generaciones de artistas y aficionados del arte.  Continuar leyendo ««Queridas viejas», el proyecto feminista de María Gimeno»